El Espíritu Santo
El Espíritu Santo también es el Dador de dones espirituales, capacitándonos con habilidades específicas para servir a Dios y a los demás en la comunidad cristiana (1 Corintios 12:4-11). Es el Testigo y Revelador de Jesucristo, revelando la verdad de Dios y Su voluntad a los creyentes (Juan 15:26). Además, es el Unificador del cuerpo de Cristo, la iglesia, formándola y fortaleciéndola como un solo cuerpo en Cristo (Efesios 4:3-6).
En términos de Su naturaleza divina, el Espíritu Santo posee atributos que solo Dios puede tener: es omnipresente (Salmo 139:7-8), omnisciente (1 Corintios 2:10-11), y omnipotente (Lucas 1:35). Además, muestra características de personalidad divina como el pensar (1 Corintios 2:10), sentir (Efesios 4:30), y actuar con voluntad propia (1 Corintios 12:11).
Para los nuevos creyentes, comprender y experimentar la presencia y el poder del Espíritu Santo es crucial. Él no solo nos convence del pecado y nos lleva a Cristo, sino que también nos guía en nuestra vida diaria, nos equipa para servir a otros y produce en nosotros el fruto que glorifica a Dios. Es un consuelo saber que Él nunca nos dejará ni nos abandonará, sino que permanecerá con nosotros para siempre.
Pastor Jhon Reyes.
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